Una reciente estimación del portal Convoca ha revelado que, durante la última década, se han destinado S/ 269 millones en proyectos para el tratamiento de aguas residuales en Perú, sin obtener resultados efectivos. Este hallazgo resalta una serie de deficiencias y problemas en la ejecución de dichos proyectos.
En el país se contrataron compañías con antecedentes negativos, incluyendo la construcción de plantas de tratamiento defectuosas e incumplimiento de contratos.
Un ejemplo notable es el mega proyecto de 269 millones de dólares, adjudicado a la empresa Operadora Ecológica del Titicaca SAC. Esta empresa está integrada por las compañías Operadora de Ecosistemas SA y Fypasa Construcciones SA.
Cabe destacar que Fypasa Construcciones SA enfrenta acusaciones en México por la construcción de una planta defectuosa y en Colombia por incumplimiento de contrato.
La situación es aún más preocupante al revisar la información del portal de la Contraloría. Una decena de proyectos están paralizados con menos del 34 % de avance físico, y otro ha sido abandonado por completo. Además, se han realizado pagos por obras que nunca se llevaron a cabo.
En total, ocho ríos desembocan en el Titicaca por el lado peruano, todos ellos contaminados no solo por aguas residuales, sino también por desechos industriales y mineros. Bolivia enfrenta un problema similar a través de las cuencas del Katari, Suches, Huaycho, Desaguadero y Circunlacustre.
Según estudios de la Autoridad Nacional del Agua (ANA), son 187 litros por segundo de aguas residuales los que se vierten hacia la bahía interior del lago.
Algo más: Se calculó que, en el lado boliviano, el estado plurinacional, hizo lo mismo son US $ 77 millones
