Durante la inauguración del Hospital de la Solidaridad en Juliaca, el alcalde de Lima, Rafael López Aliaga, fue duramente abucheado por un grupo de manifestante que le empezaron a tirar objetos y según un medio nacional, hasta orines.
El burgomaestre que se encontraba saludando a la población, acompañado de un contingente policial, no pudo impedir el sofocante rechazó de la gente.
“¡Porky racista!”, “¡Porky, asesino!”, “¡Fuera!”, le gritaba la ciudadanía, ante esto el alcalde tuvo que salir rápidamente del lugar para ir a una conferencia de prensa en la indicó que volvería a Puno, cuando deseé por que tiene familiares que son de dicha región y que nadie se lo impedirá.